De la RSE a los factores ASG (o ESG): Introducción a las finanzas sostenibles (parte II)

En nuestro último blog conversamos sobre la evolución y organización de las iniciativas de sostenibilidad corporativa desde lo que conocemos como RSE a los que hoy denominamos ASG (o ESG por sus siglas en inglés). En este blog hablaremos de cómo esto se relaciona con las finanzas sostenibles, su propósito e implicaciones para las empresas y los consumidores (tú y yo).

¿Qué son las finanzas sostenibles? Las finanzas sostenibles son uno de varios términos utilizados para etiquetar actividades relacionadas con la interacción entre la economía, el medio ambiente, la sociedad y las finanzas. Los términos relacionados incluyen ‘banca responsable’, ‘inversión responsable’, ‘sostenibilidad en seguros’, ‘ambiental, social y de gobierno corporativo’ (o ‘ASG’), ‘financiamiento climático’ y ‘finanzas verdes’. Estos términos a menudo se tratan como sinónimos, pero existen diferencias en su alcance, particularmente en términos de si incluyen cuestiones sociales y de gobierno corporativo o solo ambientales y climáticas. Básicamente los enfoques que abarcan toda la gama de estos temas se denominan finanzas sostenibles.

¿Por qué hablamos de finanzas sostenibles? Es posible que recuerdes el año 2008 debido a la crisis financiera mundial. Luego de dicha crisis perdimos fuertemente la confianza en las instituciones financieras. Surgió un fuerte consenso entre políticos, agencias reguladoras, organismos de la sociedad civil y los propios profesionales del sector financiero de que muchas instituciones financieras se habían involucrado en demasiadas actividades dañinas sin ningún propósito mayor al de simplemente incrementar sus ganancias. El sector financiero necesitaba reconsiderar fundamentalmente sus estrategias y alinearlas con objetivos a más largo plazo e idealmente socialmente responsable.

¿La respuesta? Las finanzas debían volverse más sostenibles. Esto significaba hacer que las operaciones de bancos, administradores de activos, aseguradoras y otras instituciones financieras fueran más sostenibles, lo que involucra, entre otros, considerar factores económicos, ambientales y sociales más amplios en sus estrategias y actividades.

En los últimos años esta tendencia ha dado un giro y ahora se pone más énfasis en cómo las finanzas pueden apoyar el desarrollo económico y social en general, incluido el medio ambiente. Esto involucra financiar objetivos económicos, ambientales y sociales sostenibles, a menudo los establecidos en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y a lo dispuesto en el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. Particularmente, El Acuerdo de París ha motivado de forma significativa la financiación de nuevas tecnologías y actividades diseñadas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (mitigación) y/o apoyar nuestro proceso de adaptación a los efectos actuales o proyectados del cambio climático (adaptación).

Las finanzas sostenibles se están convirtiendo progresivamente en la corriente principal de las finanzas e inversiones. De esta forma nuevos instrumentos financieros han surgido, como los bonos verdes, y los requisitos de información sobre sostenibilidad también se han reforzado. Esto implica nuevos desafíos para las empresas. Por ejemplo, muchas empresas hoy deben identificar y reportar públicamente los riesgos financieros relacionados con el cambio climático. También existe una creciente necesidad de información por parte de instituciones financieras e inversionistas en el desempeño no financiero (sostenible o de ASG) de las empresas en las que ponen su dinero. Por ejemplo, en Chile la Comisión para el Mercado Financiero publicó en noviembre de 2021 la Norma de Carácter General N° 461 que incorpora exigencias de información sobre sostenibilidad y gobierno corporativo en las memorias anuales.

Mayor transparencia (cuando es bien implementada) también favorece a otras partes interesadas incluidos consumidores y la sociedad en general. Por ejemplo, probablemente a muchos de nosotros nos gustaría saber cuál es el desempeño ambiental de los productos que compramos.

Así también, mayores exigencias de información y desempeño sostenible promueven mayor inversión de las empresas en hacer sus productos y operaciones mas ambiental y socialmente responsable. Esto genera nuevas oportunidades de negocios como las que llegan de la mano del hidrogeno verde o la economía circular.

By Luis D. Torres, PhD. 
Director Asociado en ASG e Impacto
Certificated Green and Sustainable Finance Professional